El primer paso para poner en marcha una pequeña empresa es dar con una idea de negocio ganadora. Lo ideal es que desarrolle un negocio que le interese y que satisfaga una necesidad del mercado.
Una buena manera de hacerlo es identificando un problema que te frustra. ¿Hay algún problema con el que te encuentres continuamente y que te gustaría que alguien resolviera? Esa podría ser tu próxima aventura empresarial.
Pero no necesariamente tienes que reinventar la rueda. Echa un vistazo a las empresas que ya existen y pregúntate cómo podrías mejorar lo que ya hacen. ¿Hay algún hueco en el mercado que puedas cubrir?
Decide qué vas a vender
Hay muchas cosas que hay que tener en cuenta a la hora de poner en marcha un negocio, pero lo primero que hay que hacer es decidir qué vas a vender. Tu éxito como empresa depende de tu capacidad para vender productos o servicios a tus clientes.
Elabore una lista de ideas de productos o servicios que pueda ofrecer. A partir de ahí, deberías plantearte las siguientes preguntas:
- ¿Hay demanda para este producto o servicio?
- ¿Cómo beneficiará a mis clientes?
- ¿Compraría yo este producto o servicio?
- ¿Cuánto podría cobrar razonablemente?
- ¿Hay suficiente demanda para obtener beneficios?
Escribir un plan de negocio
Lo siguiente es escribir un plan de negocio. Un plan de negocio te ayudará a ganar claridad mientras empiezas, y será de gran ayuda si decides solicitar financiación para tu pequeña empresa en el futuro.
Según la SBA, la mayoría de los planes de negocio entran en la categoría de negocio tradicional o de empresa emergente. Un plan de negocio tradicional es muy detallado. Estos planes pueden tener varias docenas de páginas y son exigidos por la mayoría de los prestamistas e inversores.
Por el contrario, el plan de negocio de una empresa emergente se centra en una visión general de alto nivel del negocio. Resumirás los aspectos más importantes de tu negocio y sólo tendrá una página. Será mucho más rápido de crear, pero si buscas financiación, los inversores pueden pedirte más información.
Decide la estructura jurídica de tu empresa
Elegir la estructura jurídica correcta es una parte importante de la gestión de su empresa. Si quiere empezar rápidamente y con las mínimas molestias posibles, una empresa unipersonal puede ser lo más adecuado para ti.
Con este tipo de modelo de negocio, no tienes que responder ante un socio o un consejo de administración, por lo que tiene el control absoluto de todas las decisiones. Sin embargo, ten en cuenta que no hay separación legal entre la empresa y tu; solo tús responsable de las deudas y demandas en las que incurra la empresa.
En cambio, una sociedad de responsabilidad limitada (SRL) proporciona más flexibilidad y crea una separación legal entre el negocio y tu; sin embargo, hay más papeleo que rellenar y tendrá que registrar su negocio en el estado.
Aplica para tu EIN
El número de identificación de la empresa (EIN) es un número de identificación fiscal federal que identificará su entidad empresarial. Si alguna vez planea registrar su negocio como una LLC o contratar empleados, necesitará un EIN.
Sin un EIN, tendrá que utilizar su número de la Seguridad Social para identificar su negocio, por lo que solicitar un EIN puede ayudarle a mantener su número de la Seguridad Social a salvo. Puede solicitarlo gratuitamente en el sitio web del IRS y recibir su EIN en cuestión de minutos.
Crear una cuenta bancaria para la empresa
Una vez que haya establecido su entidad comercial, debe crear una cuenta bancaria comercial. Esto es importante porque separa sus finanzas personales de las de su empresa.
Es una buena idea asociarse con un banco local para poder establecer una relación personal. Mucha gente considera que los bancos más pequeños son más útiles y pueden responder rápidamente si se produce un problema.
Investiga los distintos tipos de seguros
Gestionar tu propio negocio conlleva una serie de riesgos, como demandas judiciales, violaciones de datos o interrupción de la actividad. Por eso debes empezar por asegurarte de que tienes el seguro adecuado.
Un buen punto de partida es la póliza para propietarios de empresas (BOP). Este tipo de seguro incluye tres tipos diferentes de cobertura:
- Seguro de responsabilidad civil general: Este seguro cubre los daños corporales, materiales o personales.
- Seguro de propiedad comercial: El seguro de propiedad comercial protege el equipo utilizado para el funcionamiento de su negocio.
- Seguro de ingresos comerciales: Si por alguna razón no puedes dirigir tu negocio, el seguro de ingresos comerciales puede ayudarte a pagar los gastos necesarios, como las nóminas.
Es una buena idea hablar con un agente de seguros para que le dé recomendaciones específicas para tu negocio.
Prepara una oficina en casa
Si piensas trabajar desde casa, es una buena idea crear un despacho en casa. Puede ser una habitación vacía de la casa o un rincón de la habitación.
Pero debes elegir una zona que te ofrezca cierto grado de privacidad. Además, ten en cuenta el fondo, sobre todo si tienes que realizar llamadas a clientes con regularidad.
Trabaja con un contable
Los impuestos son confusos para la mayoría de la gente, y se vuelven aún más complejos cuando se dirige una pequeña empresa. Además, necesitas asesoramiento sobre cómo estructurar tu negocio, cómo configurar las nóminas y cómo hacer un seguimiento de los gastos. Por eso es una buena idea contratar a un contable.
Un contable puede ayudarle con todo esto y asegurarse de que tu empresa está al día con las leyes fiscales más recientes. Y en el improbable caso de que tu negocio sea auditado, un contable puede guiarte en este proceso.
Comprueba los requisitos legales
Siempre que vayas a iniciar un nuevo negocio, es una buena idea comprobar los requisitos estatales y locales. Algunos estados exigen una licencia o un permiso de actividad, y pueden imponerle una multa por no cumplir estos requisitos.
Dependiendo del tipo de negocio que quieras dirigir, es posible que tengas que informarte sobre las leyes locales de zonificación. Una vez que haya elegido una estructura empresarial y haya cumplido los requisitos de registro de tu estado, comprueba si hay otras leyes que puedan afectar a tu negocio.
Diseñar un plan de marketing
El marketing es crucial para crear un negocio de éxito, pero demasiados empresarios se lanzan a ello sin un plan. Esta falta de planificación les lleva a menudo a gastar un montón de dinero sin ver ningún resultado real. O lo que es peor: algo funciona, pero no tienen forma de recrearlo.
Por eso es esencial empezar con un plan de marketing. Un plan de marketing describe cómo va a dar a conocer tu nuevo negocio. Suele incluir:
- Una visión general de tus objetivos de marketing.
- Una descripción de su mercado y cliente objetivo.
- Un cronograma de las tareas a realizar.
- Métricas importantes para hacer un seguimiento a lo largo del camino.
A partir de ahí, puede esbozar sus planes para su sitio web, los canales de las redes sociales y la marca de la empresa.
Pon a prueba tu idea de negocio
Ahora es el momento de salir a la calle y poner a prueba tu idea de negocio, lo que significa que tienes que centrarte en hacer algunas ventas. Al fin y al cabo, los negocios de éxito se miden en función de la rentabilidad.
No existe un plan perfecto para lanzar tu negocio, y es posible que te encuentres con muchos errores al principio. Puede ser útil asociarse con empresas más establecidas para dar a conocer su nombre y crecer más rápidamente.
Independientemente de la estrategia que pongas en práctica, debes estar preparado para ajustarte sobre la marcha. Lo importante es que crees una solución relevante y que cubra una necesidad de tus clientes.