Cuando parece que la vida está llena de romper con los malos hábitos y hacer los buenos, jugar a “Ordenar el dormitorio” no siempre parece importante. ¿Por qué estresarse por una zona a la que no va nadie más que tú y tu pareja?
Puesto que las visitas a tu casa rara vez llegan a ese espacio personal, ésta es la habitación que cae en el desorden más rápidamente.
Pero una habitación organizada no es para el juicio de los demás; es para tu salud y felicidad.
Sí, mantener tu habitación limpia tiene un efecto positivo en tu cuerpo y tu mente. Los estudios demuestran que las personas que duermen en habitaciones ordenadas experimentan beneficios como:
- Dormir mejor
- Mejora de la salud
- Días más eficientes y productivos
- Mayor capacidad de creación de hábitos
Adquirir el hábito de limpiar la habitación no es tan difícil como dejar la cafeína o el tabaco. Sólo hay que modificar los horarios para que se convierta en una rutina.
Estos cinco trucos le enseñarán a organizar su dormitorio como un auténtico experto en decoración.
Deshazte de lo que te sobra
Todas las personas y empresas relacionadas al sector de la decoración coinciden siempre en una cosa al momento de reordenar y decorar espacios:
Tienes que quitar lo que no te sirve.
Hay una razón por la que una purga de la habitación es tan importante. Amontonar cosas lleva a la acumulación, un hábito muy perjudicial que puede tener una serie de consecuencias negativas.
Tal vez no seas un acaparador… todavía. Si ese es el caso, no debería ser difícil buscar en tu habitación posesiones innecesarias, como:
- Cantidades abundantes del mismo artículo
- Muchas camisas de un mismo color
- Prendas que ya no te sirven
- Obsequios que te regalaron y que nunca utilizas
- Piezas de colección que sólo acumulan polvo
- Joyas o ropa que nunca te pones
Sin mencionar, los viejos libros de la secundaria, juguetes de tu niñez (¡tienes 43 años por favor, ya es hora de superarlo!) y muchas cosas más que solo tus sabrás y que están debajo de la cama o guardas en el armario.
Recorre cada sección de tu habitación lentamente con una cesta y una bolsa de basura. Coloca en la cesta todo lo que no necesites y quieras vender o donar. Usa la bolsa para las cosas que deben ir a la basura.
A medida que vayas avanzando, no pienses demasiado en el proceso de purga. No pasa nada por quedarse con todo lo que quieras, siempre y cuando no estés acumulando en exceso. La clave es que cada objeto debe tener un propósito y un lugar en tu habitación.
Ordena tus muebles
Después de purgar, es hora de tomarse en serio el uso de los muebles.
Los cajones de las cómodas no deben servir para meter la ropa, y una mesilla de noche no es un colector de trastos. Sin embargo, eso es exactamente para lo que mucha gente utiliza estos muebles.
Cuando estés listo para poner en orden tu dormitorio, no te olvides de las secciones ocultas. Aunque tus cajones estén cerrados la mayor parte del tiempo, debes ordenarlos.
Empieza por la parte superior de la cómoda. Despeja la superficie plana del desorden. Está bien guardar aquí un par de fotos y una bandeja decorativa para las joyas.
Sin embargo, si tienes objetos de colección, considera la posibilidad de invertir en alguna estantería para exponerlos.
Pasa a los cajones. Cada cajón debe contener una categoría de ropa. Normalmente se dividen en grupos de ropa interior y calcetines, camisetas, pijamas y pantalones.
La forma de doblar la ropa determina la cantidad que puede caber. Hay muchos artículos en Internet que le mostrarán cómo doblar la ropa para aprovechar el espacio.
No pongas las prendas voluminosas en los cajones. Guárdalas en el armario o utiliza bolsas al vacío si no las usas a menudo.
Una vez que hayas terminado con tu vestidor, sigue las mismas reglas con tu mesita de noche. En la superficie sólo debe estar lo esencial.
Los cajones deben contener las necesidades nocturnas, como el material de lectura, las gafas, los cargadores y una linterna de repuesto. Asegúrate de mantenerlo todo ordenado utilizando cubos y separadores de cajones.
Invierte en sistemas de almacenamiento
Si has decidido quedarte con la mayoría de tus cosas, tienes que invertir en soluciones de almacenamiento para organizarlas.
Dependiendo de lo que ya tengas, podrías beneficiarte de añadir espacio de almacenamiento a tu armario y dormitorio. Sin embargo, la búsqueda aleatoria puede ser abrumadora, ya que hay muchas opciones disponibles.
Limita tu atención a áreas como:
- Cubos y cestas de almacenamiento en el armario
- Contenedores bajo la cama
- Estanterías para zapatos
- Cestas para mantas y almohadas
Prepara un presupuesto y una lista de las zonas de tu habitación que te gustaría mejorar. Utilízalos para guiar tus decisiones de compra.
Haz que la limpieza sea sencilla
Organizarse es la parte fácil. Mantenerse organizado… no tanto. A no ser que pongas en práctica un sencillo sistema de limpieza que puedas utilizar a diario.
La limpieza de tu dormitorio no debería ser una tarea profunda. Una persona media pasa la mayor parte de su tiempo en esta habitación durmiendo.
¿Cuánto desorden puedes hacer mientras duermes?
Así que, mientras estés despierto, sé consciente de lo que estás haciendo para ensuciar tu dormitorio. Utiliza estos consejos básicos para mantener esta zona ordenada en todo momento:
Haz la cama a diario.
Ten cerca un cubo de basura y una cesta.
Dedica diez minutos al día a recoger tu dormitorio.
Vacíe la basura y el cesto con regularidad.
Guarda inmediatamente la ropa limpia para que no se acumule.
Una de dos: o pasas horas lidiando con un dolor de cabeza desordenado o dedicas unos minutos al día a estar al tanto de las cosas. La elección es tuya.
Agiliza tu día
Quien mejor conoce tu rutina matutina eres tú. ¿Trabaja a tientas y a trompicones para empezar el día? ¿Te convendría racionalizar un poco tu horario?
Con unos pequeños ajustes en la organización de tu dormitorio, todo tu día puede ser más eficiente.
Te darás cuenta de que una superficie de la mesilla de noche más limpia y un armario organizado ayudan automáticamente. El siguiente paso es hacer algunos retoques.
¿Qué artículos utilizas a diario? ¿El secador y la plancha? ¿Ciertos productos de maquillaje o para el cabello? Sea lo que sea, guarda esos artículos en un lugar de fácil acceso en tu tocador.
Considera la posibilidad de elegir tu ropa la noche anterior y dejarla en la parte delantera de tu armario.
Tomar algunas medidas proactivas puede sentar las bases para que todo el día se desarrolle sin problemas.