Pero si lo que buscas es un método un poco más integrado, los espejos son el camino a seguir. Sí, puedes hacer una ventana falsa con espejos, y requiere un esfuerzo mínimo. Además, el espejo ayudará a iluminar un espacio sin ventanas o a hacer que una habitación pequeña parezca más grande.
Para simular una ventana con espejos, primero hay que calcular el tamaño de la pieza y dónde quieres que cuelgue.
El espejo en forma de ventana realza ese efecto al reflejar la luz natural que entra por las ventanas reales del espacio.
Una vez que sepas lo que quieres, puedes crear los cristales tú mismo o comprarlos ya hechos y rellenarlos con espejos.
Si quieres personalizar totalmente la forma y el color, el bricolaje puede ser el camino a seguir.
Si prefieres invertir en los cristales y encontrar sólo los espejos que se adapten a ellos, muchas tiendas, como Etsy, Walmart y Wayfair, venden cristales vacíos. O, si prefieres comprar un espejo que ya parezca una ventana, hay montones disponibles en tiendas como Wayfair, West Elm y Pottery Barn; lo único que tendrás que hacer es colgarlo. ¡Hasta nunca, rincones oscuros!